Para comenzar, hemos seleccionado la boda de Patricia y Roberto, una encantadora pareja de Burgos que se enamoró de nuestra Masía y la eligió para celebrar su enlace este pasado verano junto con su familia y amigos, a quienes no dudaron en movilizar para traérselos hasta aquí. Roberto y Patricia planearon para ellos un completo fin de semana lleno de actividades, concursos, comidas y cenas pre-boda; todo lo necesario para que lo pasaran fenomenal. Una gran reunión que nadie olvidaría. Ni las abuelitas de Patricia, con 90 años cada una, quisieron perderse la boda de su nieta; aunque ésta se celebrara tan lejos de su casa. Los novios (y aquí habría que darle un sobresaliente a Roberto, que lo controló todo desde el primer momento) planificaron hasta el último detalle, ellos pensaron y dieron forma con su creatividad a la boda que siempre habían soñado.
Hemos titulado este post Una boda en nude y limón, por los colores que la pareja eligió para la decoración. Unos tonos que resumen la delicadeza y el frescor de una boda en el campo. Una boda original, sin duda, y muy divertida; natural y desenfadada, pero con mucha clase. Solo hay que ver las imágenes. Un trabajo increíble, por cierto, del fotógrafo valenciano Fran Barba.
Hemos titulado este post Una boda en nude y limón, por los colores que la pareja eligió para la decoración. Unos tonos que resumen la delicadeza y el frescor de una boda en el campo. Una boda original, sin duda, y muy divertida; natural y desenfadada, pero con mucha clase. Solo hay que ver las imágenes. Un trabajo increíble, por cierto, del fotógrafo valenciano Fran Barba.
Los preparativos
Roberto frente
al espejo: todo bajo control.
Mientras, en la buhardilla de la
masía, la Suite Java, Patricia ha
comenzado a arreglarse. El maquillaje y la peluquería sin salir de la
habitación. "No hay prisa, tenemos tiempo". El peinado y el maquillaje a cargo de una gran profesional: Paloma Barba.
Una foto espectacular, un momento intimo y sereno.
El ramo. Sin duda un detalle que toda novia debe cuidar. El de Patricia, regalo de una de sus mejores amigas, como podéis ver era muy delicado.
Antes de vestirse, una copa de cava. Ambiente festivo.
Et, voilà! |
El cinturón fue un detalle con el que el vestido original de Pronovias no contaba y que Patricia personalmente se encargó de añadirle. Y ciertamente quedó genial.
La novia recorre el claustro de la Masía. Una de nuestras fotos favoritas. Parece flotar. Mágica.
Las plumas del escote del vestido, el bouquet en tonos nude . Detalles encantadores. |
La ceremonia
La ceremonia civil, oficiada por la alcaldesa de Castellnovo, se celebró en los jardines de la Masía. En la parte alta de la finca, junto a una pareja de viejos olivos que también asistieron a la ceremonia como testigos. Las vistas de que disfrutaron los invitados y los novios aquella tarde durante el acto, preciosas. La cálida luz del atardecer envolvió el momento -muy emotivo pero también lleno de naturalidad- que resultó incluso muy divertido en algunos pasajes. Algunos amigos participaron leyendo textos dedicados a la pareja. Como es de rigor la cosa acabó con lágrimas, ¡pero de alegría!
Originales pompones en color nude y amarillo limón decoraban toda la Masía, dándole un elegante y bonito tono festivo. Un diseño de Pepa's Party.
El banquete
Patricia y Roberto optaron por un banquete tipo cóctel servido en la terraza de la Masía. Nuestro equipo de cocina elaboró una moderna propuesta de originales aperitivos, miniplatos y minipostres con la que sorprendieron a los invitados. Una opción muy apropiada para una boda joven en el campo, natural y desenfadada. Una banda de jazz (amigos del novio) sonó en directo durante la cena. Se creo así un ambiente dinámico y muy relajado. Al final, eso sí, no podía faltar una preciosa tarta...de boda.
La fiesta
La fiesta posterior se celebró en el chill-out de la piscina. Fue una noche espléndida de septiembre. Hubo entrega de regalos con sorpresa. Cada persona elegida debía identificarse mientras sonaba una melodía escogida especiamente para ella. Algunos se hicieron los remolones, pero fue muy divertido. Como podéis ver los novios abrieron el baile dando una lección de estilo. La noche fue larga, hubo marcha hasta que los pies no dieron para más, cerca de las cinco de la madrugada. Y algun que otro invitado terminó...dándose un baño en la piscina antes de irse a dormir.
La boda de Patricia y Roberto se celebró en septiembre de 2013.
Muchas gracias por dejarnos compartir vuestro día. Os deseamos todo lo mejor.
Masía,entorno y restauración: Masía Durbá
preciosas fotos que ponen de relieve el maravilloso entorno, sin duda una boda de ensueño. Yo pasé un aniversario de boda con mi marido en la masía y nos fuimos encantados, deseando volver. Un saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias Maite por tus palabras, esperamos verte muy pronto de nuevo por la masía.
Eliminar